Quizá como nosotros, tú también has notado que cada vez que estás pasando por preocupaciones o estrés tiendes a tener más acné y el tener acné a su vez hace que tengas más estrés, por lo que caes en un círculo vicioso donde reina el estrés y el acné. Si quieres saber cómo puedes ayudarte a ti mismo para dejar de padecer acné por estrés quédate con nosotros y descúbrelo por ti mismo.

Recordemos que el acné es uno de los problemas de la piel más comunes, suele empezar en la adolescencia y aunque comúnmente desaparece cuando entramos a la adultez suele presentarse con frecuencia en varios momentos de nuestra vida. Si bien  En la adolescencia, el acné puede ser un problema muchas veces hormonal, en los adultos generalmente está relacionado con el estrés de su vida diaria.

¿Es el estrés el que en realidad causa el acné?

La respuesta es un poco más complicada de lo que parece, el estrés si puede causar el acné ya que cuando nosotros nos sentimos estresados (o tenemos una carga estresante en exceso) elevamos nuestros niveles de cortisol y esto a su vez afecta a las glándulas sebáceas haciendo que produzca más sebo tapando los poros dando como resultado la aparición de granos en nuestra piel.

¿Cómo tratar el acné por estrés?

• A pesar de ser completamente lógico, muchas personas no tratan de mejorar su nivel de estrés, para ello debemos identificar el factor que nos estresa y tratar de resolverlo, cambiar nuestros hábitos de sueño, ejercitación y alimentación pueden contribuir enormemente.
• Acudir al dermatólogo de tu confianza será la mejor forma en la que podrás atacar al acné ya que diseñaran un plan de acción de acuerdo con tu edad, peso, situación médica, etc.
• Si usted siente que tiene un exceso de acné y no quiere lidiar más con él, puede acudir directamente a su dermatólogo de confianza para que le realice una limpieza profunda profesional donde se emplea la tecnología láser (este tipo de láser no descama ni maltrata tu piel, ya que solo elimina las bacterias) menorando tu problema de acné en cuestión de horas.

• Realizar baños de vapor y utilizar compresas de agua caliente y fría es una buena alternativa para calmar el ardor y el enrojecimiento.